Fidel está dondequiera que un cubano haga el bien

«Ser hermano de Fidel es un privilegio», ha dicho Raúl sobre el Comandante en Jefe, cuyo ejemplo lo ha inspirado como a toda la Isla

Autor: Dairon Martínez Tejeda | internet@granma.cu

Ceremonia honras fúnebres del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, en el cementerio de Santa Ifigenia en Santiago de Cuba.
Raúl ha sido ejemplo supremo de fidelidad a su hermano de sangre y de luchas. Foto: Juvenal Balán

De pequeño lo veía como una joven promesa. Intranquilo, como suelen ser los muchachos, Raúl solo se llevaba las críticas, pero Fidel sentía que en él había algo más, un futuro; por eso lo asumió bajo su protección, no para mimarlo ni aplaudirle sus novatadas, sino para verlo crecer como hombre de bien.

Y creció, o mejor dicho, crecieron, del Moncada al Granma, de la prisión al exilio, de Alegría de Pío a la Sierra Maestra, de la derrota a la victoria definitiva aquel enero de 1959 y, en ese andar, con el peligro siempre a cuestas…, fundaron entre sí un vínculo indisoluble más allá de la sangre, basado en el amor y el respeto.

«Ser hermano de Fidel es un privilegio. Siempre fue, desde la infancia, mi héroe; porque de todos los hermanos, yo soy el cuarto. Está una hermana, la mayor, después Ramón, un año después Fidel, cinco años después yo. O sea, que él, llevándome cinco años, era mi hermano inmediato superior. Y siempre fue mi héroe, mi más cercano compañero, pese a la diferencia de edad».

Fidel y Raúl afrontaron juntos los peligros y retos de la Revolución. Foto: Archivo de Granma

De ese cariño mutuo la historia recoge anécdotas, sobre todo contadas por el Comandante en Jefe, pero ¿y Raúl? ¿Qué pensaba el General de Ejército de su hermano? ¿Qué vio en ese gigante que le motivó a seguirlo en todos sus lances y hasta asumir la alta responsabilidad de continuar su legado como Presidente y Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba?

Raúl no es un hombre de loas, pero que admiraba a Fidel es indiscutible, lo dejó claro en su mensaje revolucionario en la Casa de las Américas aquel 11 de septiembre de 1959: «Si Fidel Castro es hoy el líder más popular, más conocido y que más entusiasmo y adhesiones despierta en toda la América Latina, se debe no solo a la lucha armada de años, sino también, y principalmente, a que el poder revolucionario instituido bajo su dirección reivindicará resuelta y firmemente la soberanía nacional».

Y continuó en ese entonces: «Castigó severamente a los torturadores, asesinos y criminales de guerra. Inhabilitó a los políticos venales y traidores, a los dirigentes sindicales corrompidos, cómplices de la tiranía, y les confiscó sus bienes robados al pueblo. Disolvió los órganos del poder reaccionario, emprendió de inmediato medidas radicales de beneficios populares y, sobre todo y ante todo, la Ley de Reforma Agraria radical».

Aquellas medidas marcaron un hito en la historia de Cuba, el «con todos y para el bien de todos» añorado por Martí empezaba a visualizarse y para eso estaba Fidel, lo validaría Raúl, en 1959, en la concentración campesina para conmemorar el vi aniversario del asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, y en apoyo a la Reforma Agraria:

«Fidel está aquí porque hace falta, porque la nave de la Revolución necesita un timonel como él, para que los traidores no puedan detener la maquinaria de su Revolución, para que los traidores no puedan desviar el curso de la nave de su Revolución. Para cumplir el cometido de nuestra Revolución, hace falta Fidel».

«El más preclaro hijo de Cuba en este siglo», diría Raúl, justo el 26 de julio de 1994, año difícil, mas gracias al líder histórico y su relación entrañable con el pueblo se logró «la heroica resistencia del país (…), el producto interno bruto cayó un 34,8 % y se deterioró sensiblemente la alimentación de los cubanos; sufrimos apagones de 16 y hasta 20 horas diarias y se paralizó buena parte de la industria y el transporte público. A pesar de ello se logró preservar la salud pública y la educación».

En ese entonces y ahora, Cuba continuó defendiendo las banderas del socialismo frente al periodo especial, al bloqueo imperialista, a las campañas mediáticas dirigidas a sembrar el desánimo en la ciudadanía… «Nuestro pueblo bajo la conducción de Fidel –aseveró Raúl– dio una inolvidable lección de firmeza y lealtad a los principios de la Revolución».

Fue él quien nos enseñó que sí se podía derrotar en menos de 72 horas la invasión mercenaria de Playa Girón; erradicar el analfabetismo en un año, proclamar el carácter socialista de la Revolución a 90 millas del imperio, mantener con firmeza los principios irrenunciables de nuestra soberanía sin temer al chantaje nuclear de Estados Unidos en la Crisis de Octubre, enviar ayuda solidaria a otros pueblos contra la opresión colonial, la agresión

externa y el racismo.

«La permanente enseñanza de Fidel es que sí se puede, que el hombre es capaz de sobreponerse a las más duras condiciones si no desfallece su voluntad de vencer», agregaría Raúl en el histórico discurso de despedida de nuestro Comandante en su tránsito a la inmortalidad.

En ese momento evocó, además, cómo bajo el ideal fidelista  se convirtió a Cuba en una potencia médica, se transformó en un gran polo científico en campos de la ingeniería genética y la biotecnología; desarrolló el turismo y resistimos, ayer y hoy, sin renunciar a los principios ni a las conquistas del socialismo.

De hermano a casi padre, Fidel fue y es el referente para todos los cubanos, en especial para quienes guardamos parte de él en nuestros corazones. Fidel es Fidel, y por eso es inmortal su legado, el mismo que Raúl Castro explicó en varias ocasiones.

Su hermano Raúl definió su eterna presencia, tan temprano como el 5 de septiembre de 1959, al expresar que «el pueblo continuará su obra cuando ya no esté físicamente porque Fidel está dondequiera que se trabaje (…), dondequiera que la Revolución avance. Fidel está dondequiera que una intriga se destruya, dondequiera que un cubano se encuentra laborando honradamente, dondequiera que un cubano, sea el que fuere, se encuentre haciendo el bien. Dondequiera que un cubano, sea el que fuere, esté defendiendo la Revolución, allí estará Fidel».

Mi médico, el tuyo, el de la familia (+Video)

Lo que comenzó por un programa de 120 familias, hoy se materializa en la existencia de más de 11 000 consultorios y alrededor de 449 policlínicos, para un promedio de 122 habitantes por médico y 128 por enfermera

Autor: Granma | internet@granma.cu

Segunda prueba de la segunda fase del ensayo clínico de la Vacuna Soberana 2, en el policlínico 19 de Abril
Foto: José Manuel Correa

Poder contar con un sistema de Salud que garantiza la atención primaria «a la puerta de la casa», como primer eslabón del bienestar humano, o con una estrategia de vacunación organizada que ha permitido llevar la inmunización contra la covid-19 a cada rincón del territorio nacional, se debe, en buena medida, a la existencia del Programa del Médico y la Enfermera de la Familia, creado por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz hace 38 años, el 4 de enero de 1984.

De aquella iniciativa surgida en la barriada habanera de Lawton, vale destacar sus antecedentes y vigencia en el tiempo. Como evocó la entrañable periodista del Moncada, Marta Rojas –autora del libro El médico de la familia en la Sierra Maestra– al referirse a los pioneros del Programa, «andar por terrenos difíciles, en su mayoría montañosos, donde habrían de ejercer su profesión, fue una práctica sui géneris entre los jóvenes recién graduados que formaron parte de la noble institución del médico de la familia en la Sierra Maestra; el propio Fidel indicó, incluso, la ubicación, en los inicios, en territorios de las provincias de Santiago de Cuba y Granma y, de aquellos, los de más difícil acceso geográficamente».

Lo que comenzó por un programa de 120 familias, hoy se materializa en la existencia de más de 11 000 consultorios y alrededor de 449 policlínicos, para un promedio de 122 habitantes por médico y 128 por enfermera.

En tiempos tan complejos como los que ha significado la covid-19, los médicos y enfermeras de la familia han mantenido una atención individualizada.

Además, han atendido los casos sospechosos o contactos de infectados en los diferentes centros de aislamiento, y han cumplido su labor en las áreas y comunidades sometidas a cuarentena. Otros especialistas han asistido o trasladado enfermos, o dado seguimiento a los que recibieron alta médica, entre otras acciones.

A pesar de las dificultades, el Programa no se detuvo en el tiempo. Muestra de ello fue la inauguración reciente, en la provincia de Cienfuegos, del Centro de Salud de Montaña de Crucesitas, que contó con la presencia del Comandante José Ramón Machado Ventura.

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La persistente deformación de atacar los síntomas y no las causas

Opinión

Ernesto Estévez Rams – La pupila insomne – Foto: Radio Reloj.- Recuerdo no hace muchos años, un funcionario en cargo de dirección que se molestaba porque los estudiantes universitarios ya no le dedicaban en igual número que antes, la tesis de graduación a la Revolución.


Su solución, insinuada sin mucha sutileza, era que los tutores debían asegurarse que sus supervisados hicieran tal referencia. Si tal cosa hubiera ocurrido, y por suerte el claustro ignoró olímpicamente la sugerencia, la recuperación numérica de dedicatorias “revolucionarias” se hubiera tomado por “éxito” en el trabajo político-ideológico, el cuadro hubiera sido felicitado por ello, y nadie se hubiera detenido a pensar en el impacto enajenante y contrarevolucionario de la medida, totalmente opuesta a la labor ideológica que necesitamos.

Cada acto simbólico que se convierte en liturgia termina vaciándose de contenido, ya sea desde la mención del bloqueo como figura retórica, hasta la entrega del día de haber para la patria como reflejo automático. Todo acto revolucionario ha de ser singularidad consciente. Cada acto simbólico de la Revolución ha de ser revolucionario.

La práctica de juzgar a los jóvenes por su parecido formal a las generaciones que le preceden es una liturgia vaciadora. Claro está, hacer que sean calco de los que le antecedieron es imposible y por tanto, el resultado es un Frankestein grotesco: los enajenan de su edad y les abortan el potencial de liderazgo. Agunos que siguen ese camino alegran a los mayores, pero en el mejor de los casos son ignorados, o en el peor, detestado por sus coetáneos. Un joven que defendiendo a la Revolución no sea contestario y rebelde, no es un buen revolucionario.

Me da tristeza ver esa forma de alienación que es poner la mayor cantidad de adjetivos al lado del nombre de Fidel como si con eso lo hicieran más grande y a ellos, más revolucionarios. Fidel no necesita liturgias. Fue más explícito, pidió contra ellas como voluntad última. Los que invocan a Fidel como quien cae en trance por tocar el manto de Turin, poco favor se hacen como revolucionario. El Che los hubiera llamado guatacones. Pero ese discurso levanta sonrisas y hacen ganar palmaditas en los hombros, muchos lo hacen ingenuamente y de buena voluntad, pero no por ello menos equivocados. Ese discurso que nada tiene que ver con el de revolucionario es un discurso enajenante, pero lo aplaudimos y lo alentamos.

Es esencial despojarnos de todo lo que no funciona en un ejercicio a fondo. Desterrar esa inclinación por el facilismo que no es solo resultado del desconocimiento del problema, es, en mayor grado, resultado de una mentalidad aldeana incapaz de ver lo que trasciende y solo reducida a lo inmediato. Súmale el sentido de tribu que enfoca en lo que abarca la vista, y tiende a desechar lo que trasciende el alcance de los sentidos más inmediatos. Agrégale la presión interior por un actuar que conlleve el reconocimiento individual y de lo que se deriva de tal reconocimiento. En ese fermento nace y crece la mentalidad de feudo, donde el interés más abarcador de la nación se sacrifica en la cotidianeidad de “defender” a como de lugar, la pequeña parcela al alcance de la mano. Cuando esa mentalidad de feudo se generaliza, entonces se enquista la Revolución.

La incultura política, la superficialidad, unida a la búsqueda en la inmediatez de los resultados, son vicios enraizados que no apuntan a pensar como país. El hecho de que tal actitud sea, en no pocos casos, recompensada socialmente, en primer lugar por las propias estructuras sociales, instituciones y organizaciones, apunta a que el problema no es de individuos, es estructural. Derrotémoslo.

Nuestro sectarismo ha de ser uno solo: no permitimos espacios como caminos para regresar al capitalismo. No nos dividamos en como imaginamos la utopía poscapitalista, ni siquiera en definir un camino único, unámonos en combatir al enemigo de la humanidad.

El imperialismo no perdona, pero piensa. Disfraza desde la izquierda su propuesta de retroceso, impostando un discurso de diversidad y de cambio. Nada hay más sectario que pedir rendir las armas en nombre de la tolerancia. No hay discurso superador que parta de la ucronía, toda acción política está asentada en sus circunstancias sociales, por necesidad en el tiempo. Fidel la definía como sentido del momento histórico. Toda propuesta debe ser por tanto analizada desde las circunstancias en que se proclama. En la Cuba de ahora, el signo de toda acción política se define en términos de como se posiciona en la práctica, en la guerra entre Cuba y el imperialismo, que es decir en la guerra entre Cuba socialista y la hegemonía del capitalismo-mundo. Ellos no nos dan tregua, nosotros no la pedimos.

Nuestra mayor fortaleza política es la base socialista de nuestra democracia. Y esa democracia se defiende en la cotidianidad de nuestras vidas, desde nuestras casas, nuestros centros laborales, nuestras organizaciones. A la posverdad se le derrota con la verdad tangible de transformar nuestra realidad día a día, a fondo, buscando conquistar el cielo por asalto.

Delegación del ALBA – TCP visita el Centro “Fidel Castro” en La Habana

Solidaridad con Cuba

Laura V. Mor/ Fotos: Yaimi Ravelo/ Resumen Latinoamericano Corresponsalía Cuba – Video: Canal Caribe / TV Cubana – La Habana, 14 de diciembre de 2021.- Jefes de Estado y de Gobierno y funcionarios de países integrantes de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestramérica – Tratado de los Pueblos (ALBA-TCP) visitaron el recientemente inaugurado Centro “Fidel Castro” en la capital cubana, una institución pública dedicada a estudiar y difundir el pensamiento, la obra y la vida de Fidel.


El número 707 de la calle 11 del Vedado habanero recibió a los representantes cuando se cumplen 17 años de fundado este bloque de integración, cooperación y solidaridad por Fidel Castro y Hugo Chávez.

Con un moderno diseño, el Centro cuenta con varias salas, anfiteatro, biblioteca, librería y áreas interactivas que relatan la historia del líder histórico de la Revolución Cubana.

El Centro cuenta, además, con un departamento editorial, un taller gráfico y nueve salas expositivas muestran la historia de Cuba, desde 1926 hasta nuestros días, contada a través de la vida y obra de Fidel. Lo novedoso de este Centro único en el país con su modalidad interactiva y más de 40 juegos didácticos también pudo ser apreciado por los miembros del ALBA, quienes se mostraron satisfechos con el recorrido.

El Centro “Fidel Castro” es sin dudas un recorrido “fundamental para poder construir la historia” reciente -tal como expresó el Presidente de Bolivia Luis Arce al terminar la visita-, no solo Cuba sino también de América Latina.

Presidente de Bolivia elogió propuesta del Centro Fidel Castro

La Habana, 14 dic (Prensa Latina) El presidente de Bolivia, Luis Arce, aseguró hoy sentirse impresionado tras recorrer el Centro Fidel Castro en esta capital, junto a otros dignatarios y representantes del ALBA-TCP.

En declaraciones a la televisión nacional, el mandatario calificó como un extraordinario trabajo el empleo y ubicación del material interactivo que caracterizan al lugar.

Jefes de delegaciones de los países miembros de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado Comercial de los Pueblos (ALBA-TCP) recordaron hoy el legado del líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, fundador junto a Hugo Chávez del bloque regional hace 17 años.

El primer ministro cubano, Manuel Marrero, acompañó a los gobernantes en el recorrido por el Centro.

La institución, rectora de las investigaciones sobre el pensamiento y la figura de Fidel Castro, incluye salas expositivas, bibliotecas, salones de reuniones, galerías, anfiteatro, librería, imprenta y un extenso jardín.

El Centro, inaugurado el pasado 25 de noviembre, se concibió como espacio único de su tipo destinado en particular a niños, adolescentes y jóvenes.

La XX Cumbre del ALBA-TCP concluyó hoy aquí con la adopción de acuerdos de concertación política y un plan de acción que refrenda su rumbo independiente, por la integración y contra la injerencia de Estados Unidos.

La Declaración de La Habana agradeció el aporte de Cuba a otros pueblos y condenó el bloqueo de Washington contra la mayor de las Antillas y su inclusión en una lista unilateral estadounidense bajo cargos de terrorismo.

ALBA-TCP está conformada por 10 países de América Latina y el Caribe: Cuba, Venezuela, Bolivia, Nicaragua, Dominica, San Vicente y las Granadinas, Antigua y Barbuda, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía y Granada.

Los presidentes de Venezuela, Nicaragua y Bolivia, Nicolás Maduro, Daniel Ortega y Luis Arce, respectivamente, participaron en el cónclave. También los primeros ministro de Granada, Keith Mitchell y de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves.

La energía de un líder único

El yate Granma zarpa desde Tuxpan, el 25 de noviembre de 1956; son 82 expedicionarios y llevan el compromiso de ser libres o mártires. Muere Fidel,  el 25 de noviembre de 2016, esta vez al frente de una Isla-continente, y con millones de hombres y mujeres abrazados a su Revolución

Autor: Julio César Sánchez Guerra | internet@granma.cu

Foto: José Manuel Correa

El yate Granma zarpa desde Tuxpan, el 25 de noviembre de 1956; son 82 expedicionarios y llevan el compromiso de ser libres o mártires. Muere Fidel,  el 25 de noviembre de 2016, esta vez al frente de una Isla-continente, y con millones de hombres y mujeres abrazados a su Revolución.

Sus  mortales cenizas reposan dentro de una piedra, poderoso símbolo que nos recuerda los mitos de pueblos ancestrales, que reconocen en las piedras la presencia de las almas, que siguen vivas; ahora la obra y el pensamiento de Fidel son territorio de lucha ideológica y cultural.

¿El primer gran desafío de Fidel?  Intentar una Revolución emancipadora  y de justicia social, a 90 millas del imperio más poderoso que haya existido sobre la tierra. Luego, el otro dilema colosal: ¿Cómo desarrollar una economía que había dependido de Estados Unidos, si ese Gobierno establece un bloqueo que nos condena a la asfixia por falta de recursos?

El mérito de derrotar a la dictadura de Batista había sido grande, pero al reconocer Fidel el 8 de enero de 1959 que, a partir de aquel momento, todo sería más difícil, contemplaba el riesgo de asumir la total independencia para no ser colonia de nadie. Parecía imposible enfrentar las agresiones yanquis, que combinó el bloqueo económico con otras formas de terror. El pueblo cubano ha logrado resistir y acumular sus propias victorias, y al frente de esa gran proeza está Fidel. Ahora que  ya no  se encuentra físicamente entre nosotros, es preciso asumir sus lecciones para continuar haciendo la Revolución. Fidel sabe que ella no es posible sin el pueblo, por eso las medidas económicas tienen que seguir considerando siempre cómo repercuten en el tejido social del país. No teme hablar de los errores, y defiende  la verdad, los principios, el peso definitivo de la ética.

Esto nos dijo Fidel: «Armar la unidad es  asunto que define la existencia misma de la Revolución. Ser ejemplo y estar donde el pueblo trabaja y sueña; defender el amor desde la política que se esfuerza por la justicia y la felicidad, en un país bloqueado por gobernantes imperiales que no perdonan nuestra osadía libertaria».

Por eso y más, no basta con colgar de las paredes el concepto de Revolución que nos legara una mañana de mayo desde la tribuna de la Plaza de la Revolución; es preciso convertir su mensaje en práctica revolucionaria, en ejercicio de heroísmo cotidiano.

Ahora el genio del líder es un esfuerzo colectivo con muchos rostros y nombres. Una nación tan pequeña tiene dos hombres  grandes: Martí y Fidel. Las reservas morales de ese legado son patrimonio espiritual de la Revolución Cubana.

Cuando Eduardo Galeano escribió Espejos, una historia casi universal, entre sus páginas aparece Fidel; pone el escritor sobre el balance los juicios críticos de lo que dicen sus enemigos, y también lo que callan: «Pero sus enemigos no dicen que no fue por posar para la historia que puso el pecho a las balas cuando vino la invasión; que enfrentó los huracanes de igual a igual, de huracán a huracán; que sobrevivió a 637 atentados; que su contagiosa energía fue decisiva para convertir una colonia en patria… Y no dicen que a pesar de todos los pesares, a pesar de las agresiones de afuera y de las arbitrariedades de adentro, esta Isla sufrida pero profundamente alegre, ha generado la sociedad latinoamericana menos injusta…».

Esa energía revolucionaria ratifica que las ideas no pueden ser rotas por la proa de acorazados imperiales o la contrarrevolución, porque la Revolución crecida tiene delante a quien se batió por los humildes de la tierra: Fidel.

Fidel Vive: comunicado de la Asociación Valenciana de Amistad con Cuba José Martí

Solidaridad Solidaridad con Cuba

A continuación, el comunicado de la Asociación Valenciana de Amistad con Cuba José Martí en homenaje a Fidel Castro, a los cinco años de su fallecimiento.


Fidel Vive: comunicado de la Asociación Valenciana de Amistad con Cuba José Martí

Asociación Valenciana de Amistad con Cuba José Martí

Hoy, 25 de noviembre de 2021, se cumplen cinco años de la desaparición física de nuestro Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz.

Fidel fue, es y seguirá siendo, junto al libertador José Martí que da nombre a nuestra Asociación, ejemplo central y fuente de inspiración para nuestro trabajo diario. Su perseverancia y su claridad y ejemplo ante las ideas que defiende el socialismo han sido luz de guía para las personas revolucionarias del mundo entero, entre las que nos incluimos. Fidel supo mantenerse firme cuando hacía falta, supo celebrar los enormes triunfos que la revolución cubana ha conseguido, pero también supo alentar a todos los revolucionarios del país a seguir mejorando día a día en el camino hacia la libertad y el socialismo. Fue autor intelectual de muchos de los innegables avances que Cuba ha conseguido desde 1959, y esto constituye una deuda impagable para su pueblo y para todas las personas que seguimos creyendo en un mundo en el que los seres humanos estemos por encima de los intereses económicos.

El Comandante mostró siempre una inquebrantable convicción cuando la lucha del pueblo libre dio sus frutos, pero también cuando el feroz imperialismo ha tratado de frenarla de las maneras más viles e inhumanas, siendo claro ejemplo de ello el bloqueo criminal que EEUU lleva imponiendo a Cuba más de 60 años. Hoy en día sabemos, gracias a él, que los verdaderos revolucionarios deben pelear cada día de sus vidas por ganar cada batalla al capitalismo y al imperialismo, construyendo una sociedad más libre, justa e igualitaria. Si el pueblo cubano, liderado por Fidel, no se hubiese mantenido firme en los peores momentos en los que parecía que era imposible continuar con el proyecto revolucionario, Cuba nunca habría llegado a ser el país que es ahora: un país que no se arrodilla ante el más fuerte, sino que lucha hasta la victoria.

Nuestro compromiso con la revolución cubana se mantiene firme, desde hace 35 años, y hasta la victoria final, cada día de nuestras vidas.

Fidel Vive.

En Valencia, a 25 de noviembre de 2021

Se cumplió la obra de la vida: Fidel

Cuba Historia

En Cuba no hay calles, plazas ni escuelas con su nombre. Tampoco esculturas. Dicen que fue una decisión expresa de Fidel Castro, cuya impronta trasciende a su desaparición física hace cinco años, y resulta cosecha y siembra perennes. Foto: José Manuel Correa. Video: Cuba en Resumen.

Fidel Castro en la batalla

Por Orlando Oramas León (*)  / Colaboración Especial para Resumen Latinoamericano

En Cuba no hay calles, plazas ni escuelas con su nombre. Tampoco esculturas. Dicen que fue una decisión expresa de Fidel Castro, cuya impronta trasciende a su desaparición física hace cinco años, y resulta cosecha y siembra perennes.

Tuvo larga vida y la muerte le fue esquiva, a despecho de sus muchos combates y los cientos de atentados que, organizados o alentados por la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos, pretendieron descabezar a la Revolución Cubana.

En su caso se cumplió aquello de la importancia de determinadas personalidades en el curso de la historia y de los acontecimientos que marcan la vida de pueblos y del propio planeta.

Fue el mejor seguidor de José Martí y quien le cumplió sueños y desvelos por Cuba y América Latina.

Martí había descontado el regazo con el que la isla antillana, junto a Puerto Rico, quedaba cual vestigios coloniales en el continente americano.

Fidel en el centenario del Apóstol cubano se lanzó frente a un puñado de jóvenes al ataque de la segunda fortaleza militar para intentar, de golpe, poner fin a la dictadura de Fulgencio Batista.

Aquel fue el motor de la Revolución que puso a Cuba en el mapa mundial y convirtió a los cubanos en hacedores de un proceso de transformaciones inéditas en estos y otros lares.

Bajo su conducción, y con el pueblo de su lado, su país emprendió la más profunda y justa reforma agraria de la historia latinoamericana.

Ningún otro país acometió, bajo el acoso de Estados Unidos y de las bandas armadas a su servicio, una campaña de alfabetización que desterró el analfabetismo y resultó antesala de una gigantesca revolución educacional y cultural.

El archipiélago cubano se pobló de escuelas, politécnicos, universidades y otros centros de enseñanza que se hizo gratuita y universal a todos los niveles.

Dicen que Fidel podía ir al futuro, regresar y contarlo. Y quizás por ello avizoró y convirtió a un pequeño país insular del Caribe en potencia científica capaz de elaborar medicamentos novedosos e incluso vacunas propias contra la Covid-19.

Su huella viva está en ello, como también lo está en los miles y miles de profesionales cubanos y de otras muchas nacionalidades formados en su patria.

Hay calles con su nombre en otras latitudes, allí donde el internacionalismo que propugnó contribuyó en más de una manera a hacer pueblos libres, ya sea del coloniaje, del hambre, las enfermedades o de azotes naturales.

También se le recuerda por propugnar el antimperialismo, denunciar al sionismo, el apartheid y defender causas justas de los pueblos del Tercer Mundo y de los excluidos en los países ricos.

Fue un tribuno implacable en la denuncia a los desmanes de Estados Unidos contra Cuba y el mundo. Les dijo mil verdades, las mismas que hoy prevalecen y resultan órdenes de combate cuando la batalla continúa.

(*)  Periodista cubano, autor de los libros “Raúl Roa, periodismo y Revolución”, “Pohanohara, cubanos en Paraguay” y “Cuentos del Arañero”.

Fidel, un legado universal necesario para la utopía y la supervivencia de la Humanidad

Solidaridad Solidaridad con Cuba

El 25 de noviembre de 2021 se cumplen 5 años del fallecimiento de Fidel Castro Ruz. El MESC (Movimiento Estatal de Solidaridad con Cuba) hace un reconocimiento del gran legado revolucionario, no solo para Cuba sino para el mundo en su conjunto y la izquierda en particular, que dejó el líder de la Revolución cubana. Foto: Irene Pérez/ Cubadebate.


Fidel, un legado universal necesario para la utopía y la supervivencia de la Humanidad

MESC (Movimiento Estatal de Solidaridad con Cuba)*

El 25 de noviembre de 2021 se cumplen 5 años del fallecimiento de Fidel Castro Ruz. Desde el MESC (Movimiento Estatal de Solidaridad con Cuba) hacemos un reconocimiento del gran legado revolucionario, no solo para Cuba sino para el mundo en su conjunto y la izquierda en particular, que dejó el líder de la Revolución cubana. Su trayectoria política, tanto teórica como práctica, marcó la historia y el futuro del país en la construcción del socialismo cubano. Pero la contribución de Fidel también inspiró y sigue inspirando a otros pueblos oprimidos y a muchas organizaciones sociales que luchan contra las injusticias del capitalismo. Son muchas las lecciones que se desprenden de su praxis política al servicio de la justicia social y de la Humanidad, evidenciadas aún más en la actual crisis sistémica y del COVID19.

Fidel es el autor intelectual de los logros del país en el desarrollo biotecnólogico y del internacionalismo médico cubano. La gestión ejemplar de la pandemia en la isla es consecuencia de la voluntad política de crear un pueblo culto y desarrollado educativa y tecnológicamente, y con una sanidad gratuita y universal. Los avances científicos de Cuba, que han permitido vacunar con vacunas propias a toda su población, incluida la pediátrica, son resultado de la visión de Ciencia y de soberanía económica de Fidel.

La colaboración altruista de Cuba con otros pueblos fue impulsada por el Comandante en Jefe a inicios del triunfo revolucionario de 1959 y la actualizó posteriormente cuando se decía que la Historia llegaba a su fin, allá por finales de los años 80 y principios de los año 90 del siglo pasado. Desde entonces el pueblo de Fidel ha desarrollado una práctica de solidaridad internacional que ha devenido en una seña de identidad de Cuba, contribuyendo a la dignidad plena del ser humano. El gobierno cubano ha formado un personal sanitario técnica y profesionalmente muy cualificado, y con una ética que tiene como prioridad defender la vida humana, siguiendo los principios martianos de Patria es Humanidad, unidas a la humildad y el sacrificio que Fidel abanderó con su ejemplo.

Por otro lado, la visión geo-política de Fidel, siempre adelantada a su tiempo y al servicio de los humildes y las causas justas, alertó en más de una ocasión al mundo de los graves problemas de la Humanidad, señalando sus causas y a sus responsables, el capitalismo y el imperialismo: el hambre, la pobreza, la supervivencia de la especie humana, el analfabetismo, la falta de salud, la destrucción del medio ambiente, la discriminación de la mujer o por motivos de religión o del color de la piel, el acceso de los pueblos a los recursos naturales, entre otros males. En la actualidad, Naciones Unidas recogió algunos en los Objetivos de Desarrollo Sostenible y trata de eliminarlos con una Agenda 2030 que Cuba ya garantizó a su pueblo y sigue contribuyendo para que otros pueblos los alcancen.

Estos logros conseguidos por la Revolución Cubana bajo la dirección de Fidel son un ejemplo de que un mundo mejor y más justo es posible. Y por si fuera aun más difícil, todo esto se desarrolla en el contexto más hostil posible, bajo un bloqueo económico, comercial y financiero que EEUU impone desde seis décadas a la isla con el fin de ahogar la economía del país caribeño. Pero Fidel también demostró que el pueblo cubano es libre, soberano y digno, y que resiste todas las agresiones y reveses convirtiéndolas en victorias.

Y por todo ello, porque Fidel y Cuba molestan a los poderosos, su figura es atacada por la derecha y la extrema derecha. Cuba se ha convertido en un ejemplo que rompe los muros del pensamiento único, demostrando con hechos y con victorias que se puede construir un proyecto de país con unidad y verdadero protagonismo popular, con una revolución de los humildes, para los humildes y por los humildes. Este mal trato informativo forma parte de la gran matriz de opinión creada en torno a Cuba que trata de minimizar los éxitos de la revolución cubana y el papel político de Fidel mientras que maximiza las dificultades que enfrenta el país, obviando o relativizando el impacto del bloqueo de EEUU, y acusando cínicamente al socialismo cubano como sistema fallido.

Fidel nos dejó físicamente, pero queda el legado de quien encabezó la esperanza y le dio la victoria al pueblo cubano e inspiró al mundo a seguir el camino en pos de las utopías colectivas. La historia ya le absolvió. Ahora nos toca a nosotros y nosotras seguir su ejemplo y mantener vivo su legado. Será la mejor manera de rendirle homenaje, y así multiplicar sus ideas por el bien de la Humanidad y las causas justas.

25 de noviembre de 2021

* El MESC está compuesto por 55 organizaciones:

Asociación Almeriense solidaria con el pueblo Cubano

Asociación Andalucía – Cuba (puente de cooperación para el Desarrollo Sostenible)

Asociación Camilo Cienfuegos Cuba-Aragón

Asociación de amistad con Cuba Camilo Cienfuegos de Dénia

Asociación de Amistad con Cuba Miguel Hernández de Alicante

Asociación de Amistad Hispano Cubana Bartolomé de las Casas de Madrid

Asociación de Amistad Hispano Cubana Bartolomé de las Casas de Sevilla

Asociación de Amistad Hispano Cubana de Málaga

Asociación de amistad hispano-cubana Julio Antonio Mella de Madrid

Asociación de Amistad Rioja Cuba

Asociación de amistad y cooperación con cuba La Gran Piedra de Granada

Asociación de Amizade Galego-Cubana Francisco Villamil

Asociación de Cultura Popular Estrella Roja

Asociación de iniciativas solidarias Alhucema de Morón (Sevilla)

Asociación de Solidaridad con Cuba Vilma Espín San Lúcar de Barrameda (Cádiz)

Asociación de Solidaridad Toledo-Cuba «Antonio Maceo»

Asociación de Solidaridad y Cooperación al Desarrollo Ernesto Guevara de Torrejón de Ardoz

Asociación Hispano Cubana Paz y Amistad de Avilés

Asociación Lázaro Cárdenas

Asociación Maximiliano Tornet de Huelva

Asociación Pablo de la Torriente Brau de Alcobendas-San Sebastián de los Reyes

Asociación para la Cooperación Internacional Patrice Lumumba

Asociación Provincial de Jaén Amistad con Cuba Indio Naborí

Asociación Valenciana de Amistad con Cuba José Martí

Associació d’amistat amb Cuba Pep Linares d’Alcoi

Casa de Amistad Baleares-Cuba

Casal Cubà de Sabadell

Casal d’Amistat amb Cuba de Lleida

Casal d’Amistat amb Cuba de Badalona

Casal d’Amistat amb Cuba de Barcelona

CESC de Madrid

Colectivo 26 de Julio de Madrid

Comité Antiimperialista de Murcia

Comité de Cádiz contra el bloqueo a Cuba

Comité de Solidaridad Internacionalista de Zaragoza

Comunistes de Catalunya

Cosal-Murcia y Entrepueblos Murcia

Defensem Cuba

Euskadi Cuba

Frente Antiimperialista Internacionalista

HERMANAMIENTO NOU BARRIS- EL CERRO CUBA

Izquierda Unida (IU)

Marx Madera

MediCuba España

Mollet amb Cuba

O N G AWON IYAAMI

Partido Comunista de España (PCE)

Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE)

PCE (m-l)

Plataforma de Solidaridad con el Pueblo Cubano de Granada

Red de Solidaridad Canario Cubana

Rincón Cubano Granma de Torrelavega (Cantabria)

Sociedad Cultural Cubano Andaluza José Martí de Sevilla

Sodepaz

Sodepaz Andalucía

«Fidel de cerca», documental (2020)

Estrenan en Reino Unido documental «Fidel de cerca»

Londres, 6 nov (Prensa Latina) El documental ´Fidel de cerca´, un retrato íntimo de la figura del líder histórico de la Revolución Cubana a través del testimonio de familiares y personas de su entorno, tuvo su estreno hoy aquí.

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