Entre insultos, ladridos y extraños personajes: tal es el comité de bienvenida del Presidente estadounidense Donald Trump en Jupiter, Florida. Mientras Trump realiza campaña nacional, sus partidarios -como este- se dedican a hostigar a prensa y a todo el que no comulga con el ocupante de la Casa Blanca.
Según este trumpista, si seguimos entrevistando y grabando, este nos va a “romper” la cara. A pesar de que las escenas transcurren frente a la policía, los partidarios del presidente quedan impunes y aparentemente intoxicados de fantasías como su líder.
Uno de los organizadores de este rally dijo algo que llamó la atención: él expresó que aquellos que no tienen los ojos azules no son tus amigos; que no confíes en aquellos que tienen ojos de otro color y, que solo aquellos que tienen los ojos azules son parte de tu cultura, tu nación o cosmovisión.
Y así mismo este acto desesperado de racismo es parte del trumpismo: una ideología que identifica a los estadounidenses no solamente a partir del presidente Donald Trump sinó también a partir de las raíces culturales, cosmovisión y concepción sociológica de la cultura anglosajona; una cultura trabajadora que a pesar de haberle creído al presidente Trump sus brillantes promesas de un futuro mejor más bien quedó al márgen del sueño americano.
Marcelo Sánchez, Florida.