“Más que nada esta pandemia ha puesto finalmente en evidencia que muchos de los que están al mando no saben lo que están haciendo, incluso algunos de ellos ni siquiera fingen estar al mando”, dijo el
sábado el exmandatario demócrata (2009-2017), en un mensaje virtual en un acto de graduación.
Remarcó también que la crisis sanitaria es un revelador de las desigualdades que padece la población negra del país norteamericano, afectada particularmente por el nuevo coronavirus. “Una enfermedad como esta echa luz sobre las desigualdades subyacentes y el fardo que históricamente soportan las comunidades negras en este país”, agregó.
La semana pasada, Obama apuntó el dedo directamente a su sucesor en la Casa Blanca, Donald Trump, al calificar que la gestión de la pandemia era un “desastre caótico absoluto”.
Entonces, el presidente Trump no se quedó callado y a través de un tuit contestó: “Estamos obteniendo una nota estupenda” en la gestión de esta pandemia si la comparas “con el desastre de Obama y Joe Biden durante la crisis de la gripe H1N1” en el 2009 y 2010.
Congrats to the high school Class of 2020, as well as to the teachers, coaches, and most of all, parents and family who’ve guided you along the way. Thanks for letting me be part of your big day! pic.twitter.com/RjYvHs2BhC
— Barack Obama (@BarackObama) May 17, 2020
Obama, que ha tratado de mantenerse al margen de la actualidad política, desde su salida de la presidencia en el 2017, empieza a activar su presencia pública ante la proximidad de las elecciones presidenciales del próximo mes de noviembre, en las que Trump, en busca de un nuevo mandato, se medirá al candidato demócrata y exvicepresidente durante el mandato de Obama, Joe Biden.
Los comentarios polémicos de Trump sobre la pandemia, la grave situación económica y las cifras de muertos que ya alcanzan los seis dígitos pone en peligro la postura de los republicanos de cara a las elecciones presidenciales de Estados Unidos en noviembre de este año. De hecho, Trump está perdiendo puntos en los sondeos públicos.
Estados Unidos, el foco actual de la pandemia, alcanzó el sábado la cifra de 1 463 350 casos confirmados de la COVID-19 y la de 88 447 fallecidos, de acuerdo al recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins.