
El primer desfile y concentración de trabajadores y pueblo en general, en apoyo a las leyes revolucionarias, ha sido convocado por la CTC y se efectúa frente al antiguo Palacio Presidencial. «Ahora más que nunca es necesaria la unidad de los trabajadores», enfatiza Fidel, y se refiere además a que «por primera vez en Cuba, el gobierno se puede dirigir a los campesinos y a los trabajadores como a sus amigos, como a sus compañeros, como a los únicos a quienes tiene derecho a pedir, para que no fracase la Revolución».